El catalanismo o separatismo tiene muchos puntos en común con el feminismo. No es por casualidad que los congresos sobre feminismo islámico hayan tenido su cuna en Barcelona.
Ninguno de estos "movimientos" son lo que parece. Uno diría a primera vista que ambos son grupos minoritarios, desvalidos, oprimidos que reivindican derechos que les igualen a otros grupos supuesta y tradicionalmente opresores, que su única motivación es el cese de las injusticias y que su lucha tiene como objetivo final el bien común.
Lo sorprendente es que este discurso generalmente aceptado y propagado por los medios de "comunicación" es falso de toda falsedad.
En realidad ambos son grupos de presión: " lobbys".
¿Han estado "los catalanes" y "las mujeres" tradicionalmente oprimidos o han tenido menos derechos que otros colectivos similares al suyo, por ejemplo los hombres o los gallegos? Ni por asomo, se mire desde donde se mire. Solo que estos grupos opresores han contado con un aparato coercitivo de presión. El caso de los vascos es idéntico...
La historia de España de los últimos 300 años es la historia del dominio económico vasco-catalán.
Durante la época imperial de España, a pesar del dominio formal que poseía la ciudad de Sevilla, participaron sin restricciones en el comercio naval americano, pues ya en 1524 hay agentes aragoneses y catalanes operando libremente en Sevilla. Sin embargo no se nos dice que los aragoneses se reservaron los privilegios comerciales para las plazas africanas, Nápoles y Sicilia, privilegios que les fueron concedidos por los españolistas Reyes Católicos.
Repasando la historia nos encontramos que a mediados del siglo XVII los catalanes obtienen el monopolio de la Real compañía de Barcelona para el área del Caribe, y los guipuzcoanos para Venezuela, por orden del rey Felipe V, el primer Borbón.
Estamos hablando pues de un trato vejatorio y opresivo para Cataluña que contrasta con el favoritismo que gozan territorios como Murcia, Galicia, Extremadura, Valencia, Castilla. Es la realidad conocida popularmente en Cataluña como "puta españa". Es una broma. Fue precisamente el dominio de las élites comerciales y políticas (y por que no decirlo, eclesiásticas) vasco-catalanas lo que provocó el atraso económico de España a través de la monopolización económica y política, el desequilibrio territorial, la falta de competitividad, de inversión y productividad de su industria, de su dependencia exterior, y su exigencia de un mercado subdesarrollado y protegido a partir de la perdida de América. No olvidemos que tras la conquista del Reino de Valencia, los colonos catalanes, pese a contar con donaciones, regalías y privilegios se volvían a sus tierras por ser incapaces de competir en industria o agricultura con los pobladores locales, sometidos a toda clase de presiones fiscales y eclesiásticas. Los privilegios y favoritismo monopolistas para su Banca y sus industria se suceden con la monarquía constitucional, Primo de Rivera, Franco y para que hablar de nuestra democracia, recordemos el escándalo de "Banca Catalana". Así llevamos 300 años saqueados y oprimidos por los mismos que tanto gritan. Ahora pretenden continuar explotándonos sin contribuir al esfuerzo común -rectificamos, ahora el grupo de presión llamado ETA dice que va a dejar de matar para ayudar al partido en el gobierno a que la gente pague la crisis mientras sus capitales salen de rositas- del que siempre han sido los principales beneficiados aportando casi nada. La misma historia que la historia del feminismo.
¿Que el feminismo es otra cosa? En absoluto. ¿Que hay de opresor en el feminismo? Pues todo. El feminismo es un literalmente un "lobby",a semejanza del catalán, el vasco y otros cyo nombre no quiero acordar. Recordemos que un "lobby" es un equipo especializado en presión política y financiado por las multinacionales que inciden para influir sobre las decisiones de los gobiernos.
La opresión es primero para las mujeres, después para los niños y los hombres. Y desde luego el canto victimista de estas clases favorecidas no tiene nada que envidiar al canto victimista de catalanes y vascos, las "clases" secularmente favorecidas de España, que para algo la reconquista es cosa suya. Tampoco es casualidad que madamme Laure Rodriguez esté instalada en la provincias vascongadas. ¡Oh la rica subvención!
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