As-salamu aleykum,
En España, el Islam posible, que es el de los musulmanes, se halla como Abelmumim Aya en una estado deplorable. Gran parte de responsabilidad en esta situación la tiene el adoctrinamiento político recibido antes y después por los españoles que se convirtieron al Islam.
Entre las frases engañosas que tanto daño hacen y que lamentablemente van creando escuela, resaltemos una de las más absolutamente falsas porque une la verdad con la mentira en el estilo que es propio del saytan: que los españoles "vuelven al Islam". Para empezar los musulmanes no nos reencarnamos, ya que algo de eso se quiere decir con la ambiguedad de la frase. En todo caso, los niños inocentes viven en el Islam porque tienen muy vivo el recuerdo de que vienen de Allah, pero un señor o una señora que se han pasado la vida destilando odio o soñando con revoluciones sangrientas no "vuelve al Islam" sencillamente porque nunca estuvo en el Islam. El Islam desapareció de su vida como muy tarde a la edad de ocho años. Esta frase autocomplaciente de que "simplemente he vuelto al Islam" sirve a muchos para justificar perseverar con sus filias y sus fobias, de modo que el Islam realmente no pueda de ningún modo volver a ellos.
Involucrarse con el Islam significa arrepentirse de todo aquello en nuestras vidas que era decididamente anti-islámico. Ese es el primer paso para "volver al Islam" y requiere primero el discernimiento y después el arrepentimiento. Desgraciadamente, las motivaciones para "volver al Islam" de muchos españoles no están demasiado claras, algo que no es de extrañar porque lo mismo sucedía en losya lejanos tiempos del Mensajero de Allah (saws).
A nivel personal, les diré que tuve un hermano comunista, que llevaba a mi padre y a mi mismo por el camino de la amargura. Uno de sus objetivos declarados era la destrucción de la familia y había decidido practicar en casa. La verdad que para ser comunista leía bastante, desde Marx y Engels a Freud, Lukaks y Marcuse. Cuando mi padre ya estaba completamente desquiciado y resignado a padecer los ataques de sus políticas activas de inteligencia cultural, apareció un fin de semana a comunicarle que tenía pensado hacerse musulmán. Supongo que debía tener algunas nociones del incipiente proyecto del doctor Mansur. Mi padre, un hombre de origen humilde y campesino pero que había recorrido el mundo entero de lado a lado formando su propio bagaje cultural a base de darse de bruces con la realidad del trabajo, le miró con mirada de hombre avezado, y aliviado le dijo: puedes hacer lo que quieras. Bien sabía aquel buen hombre católico que mi hermano no entraría nunca al Islam. El había vivido en su juventud con los musulmanes de marruecos y comprendió automáticamente la nueva artimaña desestabilizadora del niñato progre. Para sus adentros debió pensar ¡Ojalá, mucho mejor ser musulmán que comunista! Porque mi padre al igual que yo, visitamos los países comunistas en su etapa "tranquila" y entendimos pronto la realidad de su doctrina. Mi padre además, tenía conocimiento de primera mano por cuanto vivió la República, la Guerra Civil y el campo de concentración.
Naturalmente mi hermano nunca entró en el Islam. Se trataba de una opción estratégica dentro del partido comunista que no estaba dispuesto a encarnar. Solo quería comprobar el poder destructor de la idea sobre la mente de su padre, una simple práctica de laboratorio. La crueldad de los comunistas es así de insensible con los enemigos. Mi padre era de roca afortunadamente y lo suficientemente inteligente como para darle a entender que seguir la religión del Islam no le contrariaría lo más mínimo en comparación de la charlotada revolucionaria en que había convertido su existencia, la suya, la de su madre y la de sus hermanos. Creo que fue gracias a la entereza de mi padre que mi hermano no haya formado parte de la charlotada islamista.
Esto viene a cuento de las huestes de Junta Islámica y similares. Las personas creen durante su juventud (creen, no piensan, quede claro) que las ideas más o menos polarizadas que escuchan a los mayores no son reales y deciden experimentar por si mismos fascinados por el mito del "hombre bueno" del Emilio de Rousseau. El ser humano, no puede ser tan peligroso y oscuro como lo pintan, se dicen, los mayores están llenos de ideas conspiranoicas. ¡Exageraciones, mentiras y miedos de los mayores! Desgraciadamente con el paso del tiempo comprobamos el acierto de tantos dichos y refranes de los antiguos a los que calificábamos de mentes cerradas. Resulta dificil de creer, pero es la pura realidad mal que nos pese, que el Imperio de la sangría (revolución) permanente llamado URSS ideó muy pronto una organización destinada a la infiltración de su ideología (el odio a Allah) dentro de las distintas religiones del mundo. Parece ser que tenía centros de educación teológica dispersos por Europa, uno para cada confesión. Allí se formaba a los agentes activistas y se enviaban posteriormente a seminarios y madrasas con el propósito de desvirtuar y reorientarlas en la dirección favorable a los intereses comunistas. Aunque parezca increible, en los años 30 en Francia se estimaba en más de mil los agentes comunistas que se habían introducido en la Iglesia Católica y que llevaban una doble vida. Desde dentro empezaron a inculcar el ideario comunista, entrelazándolo con la doctrina católica y ascediendo dentro del escalafón eclesiático hasta los cargos más altos. En Polonia se pudo saber tras la caida del comunismo que el 10% de los sacerdotes eran informadores de la inteligencia soviética. Otra realidad evidente de detrás de las Iglesias Evangélicas es el brazo firme de la CIA y las insiticiones filantrópicas de la alta finanza. Las Iglesias permiten además, adentrarse con cierto aire de dignidad en el territorio enemigo, como la Iglesia Ortodoxa norteamericana o la Católica rusa. Por tanto que nadie se rasge las vestidura si proclamamos abiertamente que la religión está infectada de política hasta límites nauseabundos y que aconsejemos encarecidamente no presten atención a ningún lider de opinión religiosa que no venga acompañado de los signos de la piedad y del respeto a la religión, tengan títulos de obispos o de expertos en ciencias islámicas. Este asunto es importante.
La coronación fáctica del Patriarca Sergei, en efecto, este primado a nombre del Patriarcado de Moscú y toda Rusia, decidió en 1927 proclamar su lealtad al gobierno soviético y llamar a la Iglesia exiliada a colaborar con el nuevo orden político. Baste mencionar que en la URSS, entre 1917 y 1937, fueron detenidos 136.000 clérigos de los cuales 95.000 fueron asesinados.
La infiltración en el mundo islámico es muchísimo más sencilla, por carecer con excepción del chiísmo de una Iglesia organizada. Pero tenía un problema practicamente insalvable en la claridad de la aquida islámica y el omnipresente corsé de la sunna. Pero si de ignorantes se tachan a los creyentes en los dogmas de la religión, ¿Que podríamos decir de los creyentes de la libertad y los derechos humanos de nuestros días, con el agravante de creerse los hombres más libres y equilibrados de todos los tiempos? Los mitos propagandísticos del siglo XXI son una fortaleza irracional con la que se adoctrina las mentes de hombres y mujeres desde la más tierna infancia. Esto empieza en la escuela evidentemente y culmina en el ámbito universitario, verdadero bastión del marxismo cultural, pero la fuerza alienante más poderosa se encuentra en la televisión y el resto de medios de "comunicación".
Tras la primera oleada de violencia frontal contra las religiones, el Soviet Supremo dejó bien claro su plan de no atacar más de frente a ninguna religión, procurando propagar sus doctrinas de contrabando, a través de apariencias religiosas. En otros términos, el comunismo ya no se dice más -en la apariencia naturalmene- atéo. Nunca lo fue, ya que en sus raíces ideológicas se encuentra marcada a fuego la huella indelebe del engaño talmúdico obrado por los demiurgos Marx y Engels. En cuanto a nosotros los musulmanes, ¡Abramos los ojos!. La infiltración está entre nosotros y tal como dice el hadiz, ha llegado el tiempo en que nuestros enemigos no nos tienen en la más mínima consideración pese a que seamos millones, por lo que la infiltración se realiza con la más impúdica desfachatez. La infiltración es un termino hidráulico: donde no puede penetrar torrencialmente, entra por pequeñas rajaduras insidiosas. Estas rajaduras, naturalmente, no existen en la aquida ni la estructura de las ciencias islámicas, pero infelizmente existen en la estructura debil de nuestros corazones. La política contra el Islam se realiza hoy en día por la infiltración, por la traición, por el camuflaje. Ponganle los nombres que todos nosotros sabemos y que pretenden establecer su campamento entre nosotros. Por lo tanto, aquellos que quieran ser útiles al Islam deben colaborar para deshacer las tramas de los adversarios. Los adversarios del Islam son de toda índole, pero quien haya leído el Corán alguna vez ha de recordar quienes son nuestros más enconados enemigos. Les guste o no, y ya sabemos que no les gusta porque han sido educados y condicionados desde la infancia por medio de los mitos de la derecha y la izquierda, es decir por la política para idiotas destinada a las masas.
Podríamos decir muchas cosas sobre política, política honesta e inteligente, pero indudablemente, décadas de adoctrinamiento político desde la infancia, miles de horas de televisión y prensa liberal harán sonar las alarmas de seguridad para que recibamos las voces indignadas de los unos y los otros y sinceramente, no tenemos tiempo para enseñar a hablar a quienes después de tantos años solo mugen, balan, ladran y gruñen.
Pero vamos a decir algo por hoy, por lo menos una cosa al azar, aclarando que no cabe en nuestro corazón ningún deseo bélico distinto al que por desgracia tuvieramos que padecer un día en defensa propia: "Si los vietnamitas del norte o los pastores afganos pudieron hacer frente victoriosamente a rusos y norteamericanos fue por la unidad de sus poblaciones, su apego a las tradiciones, a su etnia y a su amor a una tierra querida y protegida como una amante, por una cultura construida en base al esfuerzo, al estoicismo, el respeto a los mayores y al deseo ignato de gobernarse a si mismos, lejos de la tutela de las potencias coloniales o de las organizaciones internacionales. Un amor puramente patriarcal a la propia naciónalidad y otro amor matriarcal a la propia gente. El horizonte de los vietnamitas era un simple plato de arroz para satisfacer las necesidades físicas, el de los afganos un poco de agua para realizar cinco oraciones cada dia para satisfacer los mandatos de nuestro Creador. No hay otras armas para la victoria física, política o espiritual. Eligan.
¿O es que son vds. sabios y tienen tanto que nos pueden enseñar?
Y Alah sabe más.
Salam
2 comentarios:
A-s-salamu 'alaykum:
Profesor, este link no tiene desperdicio. Me recuerda a la canción de Gurruchaga:
Viaje con nosotros al fondo del mar
y disfrute de todo al pasar
y disfrute de todo al pasar
Divertidos monstruos te sonreirán...
http://www.webislam.com/agenda/67222-caravana_de_conocimiento_al_desierto_de_merguza_marruecos.html
salam ´aleicum
Queridos amigos, tengo una consulta, quizás me podráis ayudar.Sabéis algo de estas webs: adfoc.us
www.googlecorrection.com
www.justforlaughsgags.tv
Tengo cientos de entradas de estas páginas.
Que Allàh nos ayude y nos haga perseverar.
A, hayy.
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